
El precio de la vivienda nueva en Barcelona no registraba subidas anuales de dos dígitos desde el año 2007, antes del pinchazo de la burbuja inmobiliaria. Las casas de nueva planta de la ciudad se han encarececido un 10,6% en los primeros seis meses del año. Madrid ha registrado una subida anual del 8,5% y en Palma de Mallorca el alza ha sido del 5,3%.
El precio de la vivienda nueva está disparado, pero si se abre el mapa resulta que las subidas de precios que afectan a Madrid y Barcelona duplican la velocidad a la que crecen los precios de la vivienda nueva en el resto de España. “Los precios medios de la vivienda nueva en España suben un 5,9% anual, que se reduce al 2,8% si se elimina la influencia de Madrid y Barcelona, con lo que están en línea con otros factores fundamentales de la economía española”.
Así lo recoge el último informe de la consultora Sociedad de Tasación, que apunta que “Madrid y Barcelona distorsionan el crecimiento razonable del precio de la vivienda nueva en España”. Así, aunque ninguna capital experimenta bajadas de precios, la aceleración en el crecimiento de los precios sigue sin ser uniforme.
“Las variaciones son generalmente de poca entidad en la mayoría de las capitales, con las excepciones de Barcelona y Madrid, que son muy superiores al resto, y podrían acercarse a máximos de 2007 antes de lo previsible según la evolución de ciclos económicos anteriores”, indcan en la tasadora. De hecho, en la primera mitad del 2018, el precio medio de la vivienda nueva en España aumentó un 2,6% en las capitales de provincia, alcanzando los 2.284 euros por metro cuadrado, con un crecimiento inferior al 3,3% registrado en el semestre anterior”, apuntan en la tasadora. El precio medio de una vivienda tipo de 90 metros cuadrados en las capitales de provincia es de 205.600 euros. En el resto de ciudades, el precio medio de una vivienda nueva baja hasta los 1.605 euros por metro cuadrado, lo que supone un aumento del 2,9% respecto a junio de 2017.
Esta distorsión en el comportamiento de los precios en los municipios de Madrid y Barcelona está comenzando a afectar a sus áreas metropolitanas. En el caso de Madrid, las poblaciones de la zona oeste registran los mayores crecimientos, entre el 6% y 7%. En Barcelona, el efecto se distribuye de manera más homogénea a lo largo de toda la corona metropolitana con incrementos que llegan hasta casi el 7% en algunos casos.
El País