
Se puede vincular el incremento del desempleo con la subida del salario mínimo interprofesional (SMI)? Hace unos días se hicieron públicos lo datos nacionales de paro registrado a enero de 2019, que arrojaron un aumento de 83.464 desempleados con respecto al mes de diciembre de 2018, lo que supone un aumento del 2,61% con respecto al mes anterior. Tras su publicación, muchas voces se han alzado para interrelacionar este dato objetivo (el aumento del número de desempleados) con la subida del SMI, instrumentalizada mediante real decreto publicado en el BOE de 27 de diciembre de 2018 y que ha supuesto un incremento del 22,3% respecto de las vigentes entre el 1 de enero y el 31 de diciembre de 2018.
Sin embargo, esta pretendida interrelación no es tal y difícilmente puede defenderse a día de hoy. Y estos son los motivos.
Es importante recordar que el Comité Europeo de Derechos Sociales nos ha aconsejado en reiteradas ocasiones que el derecho de los trabajadores a una remuneración suficiente, reconocido en la Carta Social Europea recientemente ratificada por el Consejo de Ministros y remitida a las Cortes Generales, se refleja en que el SMI debe situarse en el 60% del salario medio de los trabajadores. Y si bien el SMI de 900 euros mensuales no supone situarnos en este umbral mínimo recomendado por Europa, a nadie se le escapa que nos acerca al mismo, pudiendo a su vez ser una fórmula eficaz para ayudar a avivar la economía, el consumo y, en definitiva, repercutir positivamente en la creación de empleo y no en su destrucción.
Dicho todo lo anterior, deberemos esperar a los datos del paro que se registren los próximos meses –sin las particularidades del mes de enero y la campaña navideña– para ver si se confirman los argumentos arriba expuestos o las perspectivas negativas que hemos tratado de rebatir.
Cinco Días